El presidente del Banco Nacional Suizo, Martin Schlegel, ha descartado la incorporación de Bitcoin como activo de reserva en el país, argumentando que su elevada volatilidad, la falta de liquidez suficiente y los riesgos de seguridad inherentes al manejo de software, lo convierten en una opción poco adecuada para sostener las reservas nacionales. En declaraciones realizadas a medios locales, Schlegel explicó que, para fines de política monetaria, los activos deben ser altamente líquidos y estables, características que considera ausentes en Bitcoin y otras criptomonedas.
El funcionario contrastó su postura con la propuesta de un grupo de expertos que pide, mediante una enmienda constitucional, que el Banco Nacional Suizo incluya Bitcoin en su balance. Esta iniciativa, promovida desde el interior de la comunidad cripto, ya cuenta con mecanismos formales para ser sometida a referéndum, requiriendo la recolección de 100,000 firmas en un plazo de aproximadamente 16 meses, en un país con casi 9 millones de habitantes.
Schlegel también puntualizó que, a pesar de que el mercado cripto mueve cifras cercanas a los 3 billones de dólares, sigue siendo un fenómeno de nicho cuando se compara con el sistema financiero global. Asimismo, afirmó que las criptomonedas no representan una amenaza competitiva para el franco suizo, subrayando que la estructura de la moneda local ofrece una seguridad y estabilidad que, en su opinión, las criptomonedas aún no alcanzan.
Este debate se enmarca en un contexto más amplio, ya que otros países como Estados Unidos, la República Checa, Hong Kong, El Salvador e incluso Polonia han analizado la posibilidad de adoptar a Bitcoin o de descartar su uso como activo de reserva. La postura de Schlegel evidencia la cautela de las autoridades tradicionales ante la incorporación de activos digitales en las estrategias macroeconómicas nacionales.