La esperada actualización Pectra de Ethereum se perfila como un motor fundamental para desencadenar la siguiente fase del ciclo criptográfico de 2025, a pesar de que el rendimiento del Ether ha sido menor en comparación con Bitcoin últimamente. Durante febrero, el precio del Ether sufrió una caída superior al 32%, alcanzando un mínimo de más de dos meses cercano a los $2,073, para posteriormente recuperarse y situarse alrededor de los $2,245. La actualización, prevista para el 5 de marzo, busca reducir la presión de venta a largo plazo al optimizar el proceso de consenso y mejorar la escalabilidad mediante soluciones de capa 2.

Expertos del sector destacan que, aunque esta actualización no provoque un aumento inmediato en el precio, representa un avance significativo en el fortalecimiento del ecosistema Ethereum. Gabriel Halm, analista de una reconocida firma de inteligencia blockchain, señaló que el proyecto permitirá ampliar la capacidad global de la red, lo que incrementará su competitividad en un mercado cada vez más exigente. Asimismo, la implementación de la propuesta de mejora EIP-7251, que incrementará el límite de staking para validadores de 32 a 2,048 ETH, facilitará la acumulación de ganancias y contribuirá a disminuir la presión de venta con el tiempo.

El análisis técnico reciente sugiere que la corrección mensual de más del 32% podría estar preparando el terreno para un nuevo ascenso, apoyándose en patrones fractales observados en ciclos anteriores. En paralelo, la Fundación Ethereum ha anunciado un cambio en su estructura de liderazgo tras una serie de críticas acerca de la dirección de la red. En respuesta a las preocupaciones de la comunidad sobre la competencia de cadenas de alta capacidad y soluciones de capa 2, la organización ha designado a dos nuevos co-directores: Hsiao-Wei Wang, investigador principal de la Fundación, y Tomasz Stańczak, CEO de una de las principales empresas de ejecución en Ethereum, quienes asumirán sus funciones el 17 de marzo.

Estos movimientos estratégicos pretenden reconquistar la confianza de usuarios e inversores, implementando medidas que fortalezcan tanto la infraestructura técnica como la operativa de la red. Con la mirada puesta en el ciclo de 2025, los analistas mantienen el optimismo de que dichos cambios, combinados con las mejoras técnicas de la actualización Pectra, podrían favorecer una recuperación sostenida en el valor del Ether.